Semen de mujer, 2da parte, “Allison”.

Semen de mujer, 2da parte, “Allison”.

Los días transcurrían, podía ver a mi mujer, pensativa sentada en la cama, acariciando su vientre, llevaba un hijo no deseado, embarazada sin quererlo de “una mujer”, aquello era una situación extraña, pero ella había tomado ya su decisión, lo iba a parir.

Yo le había propuesto abortar, pero críada entre católicos ella creía que abortar no era correcto, pero igual ya había pasado el tiempo seguro, un aborto a los 5 meses era riesgoso.

Su vientre era una pequeña pelota, el embarazo la hacía más hermosa.

-“¿Estás segura de la decisión tomada?”-, le pregunté.
-“Sí, ellos deben saberlo son parte de ello”-, me dijo.

Todo el tiempo estuvimos ocultando el embarazo a familia, vecinos y amigos, diciendo que estaba gorda por el primer embarazo.

Viajaríamos el próximo mes a U.S.A, le diríamos lo sucedido a Allison y Markus, les ofreceríamos el niño, pero de no aceptar no tendríamos más alternativa que darlo en adopción.

Enviamos un mail, -“Llegamos el 10 de Agosto, llevamos la niña con nosotros”-.

Aprontamos, todo mi mujer se puso su ropa de embarazada que le era más cómoda.La gente en el aeropuerto al verla con un bebé de pecho y embarazada, chusmeaban, -“ ¡ Qué locura esa chiquilina, con un bebe de meses y otra vez encinta, no saben cuidarse ¡”-.

Tal cual lo previsto abordamos el 767 de AA, hasta Miami y trasbordo para otro a Los Angeles. Markus Parker y Allison White, vivían en Sta.Mónica, una ciudad en el condado de L.A, bañada por el Pacífico, muy bonita, moderna ciudad de 100000 habs, solo a 30 minutos del centro de Los Angeles. Posee unas impresionantes playas.

El viaje fue largo y agotador, casi 24 horas volando una verdadera locura, Pero llegamos.

El Aeropuerto era una locura, un infierno de gente y los controles policiales casi abusivos.

Por suerte esperándonos estaba, Franco, siempre con su gran sonrisa.Tras pasar migración, nos ayuda con las valijas, mira a mi mujer y sonriendo pregunta, -¿Uhh, y eso?-.
-“Ya te explicaremos luego”-. le contestamos.
-“El Señor Markus y la Señora Allison, los esperan en su casa”-, aclara Franco.
Subimos a una enorme camioneta 4×4, vidrios tintados, muy lujosa y hasta blindada.Franco llevaba un ayudante, otro individuo que no hablaba, pero el bulto en los sobacos bajo su americana daban a entender que su fuerte no era la conversación.

Tras andar, 40 minutos llegamos a Sta.Mónica, nuestros guías respiraron profundo al salir de L.A. luego nos explicaron que es una ciudad peligrosa, pandillas, drogas, tráfico de personas.

Pudimos saber que Franco tenía amigos en ambos lados de la ley y se movía por una línea peligrosa.

La casa a la cual llegamos era enorme y poseía personal de seguridad propio.

Markus había heredado un imperio, pero ahora estaba un poco aislado de su familia, ellos lo consideraban un excéntrico, degenerado, perverso, marica, por sus costumbres de visitar la comunidad gay y hacer fiestas locas, no veían con buenos ojos su concubinato con una trans.

Pero como empresario era un temible rival y había cosechado amigos…también enemigos, de ahí la vigilancia contratada.

Sus maniobras comerciales fueron investigadas por la impositiva y hasta la DEA estuvo tras él, no pudiendo probar nada.

Allison White, era nacida como barón, en realidad se llamaba, Miguel Orozco, era de ascendencia mejicana, desde los 17 años era casi mujer debido al uso de hormonas y pequeñas cirugías, llevaba una estricta dieta y era asidua al gimnasio.

Llegamos y tras atravesar la vigilancia, revisaron el coche en busca de drogas “plantadas” y equipos de escuchas, cuando declararon al coche limpio pudimos pasar.

Allison y Markus esperaban en la puerta, ansiosos, lo primero que hicieron fue tomar y besar a nuestra hijita de 7 meses, pero cuando vieron la panza de mi mujer quedaron de piedra como la mujer de Lot.

-“No sabíamos, que…”-, susurró Markus.
-“Tenemos que hablar en privado, esto les compete”-, dijo mi mujer.
Nos llevan a un despacho, privado, quedamos a solas con ellos y les confesamos.
-“Es de Allison”-, le digo a ellos.
-“¿Pero como?… no es posible, había forros”-, dice Markus.
-“Yo pense…que…Allison…era una chi…que no tenía ver…”- trataba de explicar mi esposa sin herir a nadie.
-“Sí, me olvide del forrito, estaba muy caliente”-, confiesa Allison.
-“ ¡ Ahora quieren dinero¡ , quieren chantajearnos”-, grita Markus enojado.
-“No, te equivocas venimos a ofrecerles el niño, nosotros no lo buscamos, Allison es su pad…su madre”-, responde mi mujer.
Markus calla, Allison no termina de asombrarse era algo inesperado para ellos.
-“Tenemos que pensarlo un par de días, esto es nuevo”-, pidio el hombre.
Después de esta conversación nos llevaron a la casa de huéspedes, una enorme casa, nuestras ropas ya estaban acomodadas había una cuna y una asistente a disposicion.
-“Descansen, nuestra casa es suya”-, de despidió amablemente Allison.
Ese par de días Franco nos llevó por todo el pueblo, hicimos playa salimos de compras, se pasaron volando las horas.
Pasados los dos días solicitados, Markus y Allison aparecieron en nuestra puerta.Entraron y hablaron
-“Con gusto aceptaremos ese hijo como propio, si se somete a una prueba de ADN, que nos confirme que es de Ali”-, agregó Markus.
-“Sí, ¿cuándo?”-, preguntó mi esposa.
-“Esta tarde, no requiere ayuno”-, agregó el sujeto.

Los cuatro mas la escolta fuimos a una clínica privada, un médico le saco sangre a Allison, pero luego apareció con una gran aguja dispuesto a pichar el vientre de mi esposa, gritó, dolió a pesar de la anestesia local.Tardarían una semana en procesar las muestras, una semana larga, quedamos tostados de hacer playa.

Llego el resultado, fuimos a la casa principal, Markus abrío el sobre y leyó, -“100% seguro que es el padre el sujeto analizado”-, o sea Allison.
-“Voy a ser mamá”-, rió feliz Ali.
-“Les tenemos otra noticia, hoy es el último día que Ali, tiene algo de hombre, esta semana mientras ustedes gozaban del sol de California, nosotros coordinamos en la clínica que ustedes conocen, un cambio total, radical de sexo para Ali, será una mujer totalmente”-, explicó Markus.
-“Maki, me ha pedido matrimonio, nos vamos a casar en Las Vegas-Nevada, después de la cirugía, estoy ansiosa”-, dijo Allison.
-“Felicidades”-, les dijimos.

Markus, trajo botellas de champagne, abrió y brindamos, por nosotros por ellos, por los hijos.Luego nos invitaron a ver en su dormitorio la ropa comprada para el bebé.
Buena, cara y hermosa ropa, seguimos bebiendo y la felicidad sumada al alcohol, liberó tensiones, desinhibe los instintos.

-“Ven aquí madre, quiero verte”-, le dijo Markus a mi mujer.
Ella se acerco a él que estaba sentado en el sofá grande, él paso sus manos por el vientre de casi siete meses de mi esposa y agregó.
-“Quítate el vestido quiero verlo”-.

Ella duda, pero como es para verle la panza accede.

Markus ahora ve a mi esposa en prendas interiores, le besa el vientre y escucha al niño, luego sus manos suben por la espalda de mi mujer y desabrochan el sujetador, que cae, ella me mira como buscando algo, como no digo nada ella se queda quieta y él le soba las tetas, sacando leche de ellas, mete su boca y mama muerde los pezones, ella gime, -“ ¡ Ah ¡”-, mientras unas manos le bajan la bombacha.

Mi mujer está ahora de pié frente al yanquee, desnuda, preñada, las mismas manos que le quitaron la bombacha ahora le untan todo el cuerpo con oloroso, aceite de almendras que no se de donde lo ha sacado, ella brilla, huele, esas manos ahora le masajean el clítoris, le abren la vulva y le masturban, ella gime, cierra sus ojos y se olvida de mí.

Se implica y disfruta, al sentirse deseada con esa panzota se moja.

Sin dejar de chupar sus tetas y beber su leche, Markus se desnuda, hasta quedar en bolas con su gran pene erecto, sus huevos llenos, su glande hinchado.

Luego la acerca a ella hacia él, tomándole de las nalgas y susurrando, -“! Sube sobre mí ¡”-.

Ella se sienta sobre él, veo como el pene, abre la vulva roja e hinchada de mi esposa y desaparece dentro de la profunda concha de ella.

Allison riendo se desnuda, me es incómodo verla con ese gran pene colgando, viene hacia mi y ofrece su cola, declinó cortésmente diciendo que no estoy preparado, ella entiende, pero me dice, -“Vamos nene igual me gusta verte desnudito”-, he insiste en desnudarme, termino en bolas con la cabeza de Allison sumergida entre mis piernas.

Escucho como gime mi mujer, un canto de sirena, -“Ah, ah,ah,ah”-, pausado y con ritmo, cada vez mas alto, hasta llegar al orgasmo cabalgando a Markus hasta sacarle la leche, gritará, -“! Uhhh, uff, ya, ya…viene…aaahhhhh, aaaaaacaaaaabooooooo, aaaaaaaaaahhhhhhh, mi Dios ¡”-, un orgasmo fabuloso, que haría que yo explotara dentro de la boca de Allison, quien susurraría, -“huuummmmmggg”-, al casi ahogarse de sorpresa con mi leche.Allison se para relamiendo los restos de mi leche en sus labios, ríe y se dirige hacia la pareja que coje, me mira e invita a ir con ella.viaje

Allison toma un bote de crema, se masturba unta su pene que toma brillo, crece y crece, luego se acerca por detrás a mi mujer, ve la concha ya llena por la pija de su pareja, pero el culito está libre, apunta su glande, empuja el ano cede, Markus sujeta a mi esposa mientras ella grita -“Aaaahhhhh, haaayyyy, dueeeeleeeee, desspacio…despacio…duele”-, mientras es enculada por Allison, en cuestión de segundos todo el pene entra, ahora mi mujer está doblemente siendo penetrada, dolor y placer a la vez, llegará a otro orgasmo, intenso que hace que me acerque y le de a mamar mi verga.

Con todos sus agujeros llenos ella goza, pero uno en uno irán descargando su caldito tibio dentro de la gestante mujer, boca, culo , vagina todo blanco y chorreante.

Ella se sienta en el sofá manchando el fino cuero con el semen que le chorrea, Markus se acerca a ella y se masturba sobre sus tetas, hasta bañarla en leche, luego con su mano desparrama el elixir masculino como crema corporal.

De repente sentimos ruido en la puerta, alguien nos espiaba, segundos mas tarde, aparece Franco, casi trayendo a rastras a una de las mucamas.

-“Disculpen la pillé espiándolos”-, dijo Franco al vernos desnudos.
-“Deja a la chica y vete”-, ordena Marcus.
-“¿Como te llamas niña?”-, pregunta Marcus.
-“Lupe, me dicen Lupita”-, responde con acento mejicano.
-“¿Te gusta lo que veías?-, pregunta el hombre.
Ella hace silencio con vergüenza, Markus repite la pregunta.
-“Sí”, responde con timidez.
-“ ¡ Desnúdate ¡”, ordena el yanquee.
-“Yo…yo…no…”, titubea la chica.
-“¿Quieres mantener el trabajo?”-, amenaza Markus.

La chica timidamente se desnuda, uniforme, sostén blanco y una bombachita casi infantil.

Quiere cubrirse con las manos sus partes, no estaba rasurada pero su bello era poco, debía tener 18 o 19 años. Morochita, pequeña con rasgos amerindios.

-“Vamos siéntate en este sofá y abre las piernas”, ordena el dueño de casa.
-“ ¡ No, patrón…por favor ¡”-, rogaba la empleada.
-“Te recuerdo que la que espiabas eras tú, tu tarjeta verde puede expirar en cualquier momento”-, comentó Markus.
Markus me mira y me dice, -“Tú, coge a esta nena dale lo que vino a buscar”-.Yo estaba excitado me gustaba la chiquilla, que ahora abría las piernas enseñando su sexo.
-“No, no porfa, patroncito”-, chillaba la nena en vano.
Me coloque entre sus piernas se las abrí y levante, apoyé mi verga erecta sobre la vulva de la chiquilla, me costaba penetrarla, pero empujé cedió y la nena gritó, -“Hayyy, nooooo”-, mi verga se hundió en ella, rompiendo esa resistencia inusual.Bombee una y otra vez, mientras sentía las miradas de los otros, la mucamita empezó a gemir,
-“! Ah,no,ah,ah,ah,no,no, me chingues más,aaaaaahhhh”, se hizo mas intenso, ella cerró los ojos, vibró, llegando a un intenso orgasmo, -“ ¡ Aaaaaaaahhhhhhhhhhhhhh, ¿Qué …que…es esto… Virgen de Guadalupe., perdona a es,esta .ah, ah.ah…pecadora..aaaahhhhhhh?, yo le apretaba sus tetitas, sus pezones pequeños y duros .
-“Cielo, mueve las caderas”-, le pedí, mientras me afanaba por darle placer.
Ella abrio grandes los ojos, me miraba con grandes ojos negros, una mirada extraña mezcla de curiosidad y deseo, por unos segundos no supo que hacer, que contestar, abrió la boca para hablar pero solo articuló un gemido, noté como sus caderas movían, mi pene se adentró más aún en ella, una penetración profunda, no pude aguantar mucho más, gritando -“! Ohhhhhhhhhhhhfffffffff ¡”-cuando me sentí irme en leche, llenando la matriz de la chiquilla , las uñas de la chica estaban clavadas en mis nalgasmatrimonio.
Cuando me retiro, mi verga tiene sangre y el semen que salia de la conchita de la nena era rosado, ¡ Era virgen ¡, la había deflorado, lo que rompí fue su himen.Los otros no lo habían notado.
La chica se pone su bombacha como pañuelo entre sus piernas, me mira fijo, toma sus ropas y sale corriendo de la habitación, llorosa, había perdido, su virtud , reservaba para el matrimonio, con un hombre y casado, salíó mujer de la casa de su patrón, de fondo las risas de los demas.
-“No creo que le vaya más el voyeurismo”-, comentaban jocosos.

Agotados jadeando medios borrachos, nos sumergimos en el Jacuzzi de los gringos, rodeados de velas aromáticas encendidas, los cuatro nos relajamos.Luego nos despedimos.
Temprano al otro día, Allison sería…castrada.

Al otro día acompañamos a Ali, un equipo médico la esperaba, más de 300.000 U$S salió la operación, urólogos, ginecólogos y cirujanos plásticos.

Despúes de ingresarla en quirófano pasarían 7 horas antes de tener noticias.

Un médico el vocero de la clínica, nos dijo, -“Todo salió según lo esperado, pero el postoperatorio será largo y complicado”-.

Markus, nos pidió que lo ayudáramos a cuidar a Allison y a tener el parto ahí, él lo pagaría.Aceptamos, mientras pasaban los días, el vientre de mi mujer crecía mientras sanaba Allison sus cicatrices.Yo mientras hacía trámites para futuros negocios representando los coches de Markus en mi país.Pasaron dos meses, la travesti se convirtió en chica al fin, sanaron las heridas, su entrepierna ya no abultaba.Mi mujer estaba ya a punto de parir.Un día salieron ambas mujeres solas volvieron bebidas, ebrias, riendo, diciendo que nos traían un regalito.Lo descubrió mi esposa cuando se estaba bañando ya sobria, roja de vergüenza me llama me muestra, tenía tatuado en el pubis, los nombres de nuestros anfitriones unidos con eslabones de cadenas, un tatuaje similar tendría Allison.Desde ese día cada vez que volteo a mi mujer tengo que ver el nombre de Markus en su concha.
Dos días más tarde, mi mujer rompe aguas la llevamos a la clinica, tuvo un largo trabajo de parto, solo Markus entro al parto, Allison y yo estabamos en una habitación contigua, con un pequeño cristal que daba a la sala de partos,mientras mi mujer pujaba y gritaba, Allison estaba muy caliente conmigo, me dice.

-“Soy una chica ahora, ¿quieres ver como quedé?”-, pregunta, sin tiempo a darme para contestar, se desnuda totalmente, era una mujer, no habia pito ni huevos, había una aparente concha.Ella se acerca me besa, me desnuda, entonces le doy la vuelta le separo las piernas, apoya su brazos contra el cristal que da al parto, la penetro analmente, casi con furia, con bronca por preñar a mi mujer, le doy con todo, le rompo el orto, ella grita y sus gritos acompañan a los de mi esposa, mientras una cabecita aparece entre sus piernas.Cuando escucho el llanto de un bebé, acabo llenando la cola de Allison de leche.

Días más tarde, volveríamos a nuestro país dejando ahora una familia completa.Nos despedirán en el Aeropuerto Allison con su bebé y un feliz Markus.

Diez meses más tarde, llegaría a mis manos un mail de la pareja, en el decía.

-“Estamos pensando darle un hermanito a Brian, será de Markus, estamos pensando en ustedes para que ella sea madre ya que yo, no puedo concebir, les daríamos una compensación económica.

Pda: ¡ Ah ¡, me olvidaba, desde que se fueron la pancita de Lupe no ha dejado de crecer, creo que tienes una hija, llamada, Milagros, en Puebla- México. Besos Allison”-.

Me quede helado la chica no tomó nada no hubo plan B.

Con respecto a las intenciones de Markus, era obvio que la inseminación sería natural en una cama, las dos veces que se cogió a mi mujer ella estaba drogada o media ebria, pero en frío hummmm, aún no hemos contestado…

Eso será en otra historia.

FIN.

Author: Bizarrot

Hombre,hetero,44a