Carol

Relato enviado originalmente por Pedro Q. el 28 de Septiembre del 2000 a www.SexoServicio.com

Tenia como un mes de haber Terminado con Carol, nuestra relación en el aspecto sexual había sido excelente, siempre andábamos buscando nuevas formas de expresar nuestra sexualidad y cada vez que experimentábamos algo nuevo ella se ponía a mil y experimentaba Múltiples orgasmos, pero bueno después de no vernos por un tiempo le hable para invitarla a salir y me dijo que quería ir a la playa así que la invite, el volvernos a ver fue como recordar todos aquellos cachondos momentos que habíamos vivido, nos tiramos al sol y tomamos algunas copas, nos metimos al mar y ella sugirió que alquilara una moto acuática, lo hice y nos subimos juntos, yo manejaba y ella iba sentada atrás de mi, la velocidad y el Sentir su cuerpo junto al mi de nuevo me prendieron de volada y le Pedí que manejara ella, ni Tarda ni perezosa y con una habilidad increíble se paso al frente dejándome las manos libres para poder acariciarla,

empecé por safarle el salvavidas y me di gusto con sus bellos y duros senos, de Inmediato se pararon sus pezones, al principio protesto un poco, pero se prendió también, como traía un bikini pues me facilito muchísimo las cosas, fui bajando mis manos al tiempo que besaba su nuca, lo que hacia de subiera y bajara la velocidad dando un ritmo increíble a lo que empezábamos a hacer, cuando empecé a acariciar su clítoris volteo y me dio un beso súper cachondo y soltó momentáneamente el volante para tocarme y percatarse que ya la tenia súper parada, siguió manejando y yo seguí con lo mío hasta que se detuvo y me Dijo que no siguiera que no se quería venir sin sentirme adentro, de un solo movimiento se dio media vuelta para quedar frente a mí y de un solo empellón se la metí hasta adentro, en ese momento sentí que me venia al sentir su humedad y su calor apretándome pero logre contenerme, tome yo el volante y me fui hacia mar adentro, primero iba despacio, pero como se acercaba una lancha y nos podían ver fui acelerando y al golpeteo de las olas y la idea de que alguien nos estuviera viendo le imprimieron un ritmo y un toque hiper cachondo al asunto, no necesitamos movernos el mar y el ski lo hacían por nosotros y cada ola era una embestida, en cuanto acelere sentí su primer Orgasmo y de nuevo casi me vengo yo también pero el Pensar que tenia que alejarme de la lancha y el ver como lo disfrutaba hicieron que me controlara avanzamos un buen tramo y antes de bajar la velocidad sentí de nuevo como sé venia, par cuando me detuve ella me besaba como loca, yo le safe el salvavidas de enfrente y empecé a besar su senos y a morder sus pezones, ya no aguantaba mas sus contracciones me estaban prácticamente exprimiendo y explote en un orgasmo en el que sentí como si salieran litros de mi, ella me apretó fuertemente contra si y me dijo que por lo menos se había venido cinco veces, medio nos acomodamos la ropa entregue el jet ski y nos fuimos a un motel, íbamos entrando y ella me bajo los pantalones y me dio la mamada de mi vida en menos de cinco minuto Hizo que me viniera y que me recuperara de nuevo para hacer el amor toda la tarde hasta quedarnos profundamente dormidos.

Benditas sean las reconciliaciones.

Author: CuentosCachondos

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