Pasión en el Tren 2


Pasaron los días y no podía quitarme de la cabeza el medio polvo ferrovial con la pelirroja de escándalo6b60ae1c2fae4a31598e8fee3aac47e16bbdb0dc.

Fui directo donde había guardado el papel con su número,  estaba en el sitio más seguro, con la hierba,  los placeres juntos, me hize un canuto, mi mente volo igual que mi mano recordando su cuerpo divino.
Ni me limpie,  cogí el teléfono imprecnandolo de semen,  necesitaba oír su voz,  oír una fecha para el segundo y espero que último asalto, de muchos combates.
Al descolgar y hablarme recordé su tono de voz  gimiendo me al oído,  mordiéndome el cuello,  como me cogía el culo clavando me las uñas y se me  puso morzillona otra vez,  me tocaba,  ella reconoció mi voz y dijo espera,  se escuchaba hablando con alguien levemente y de repente,
Sábado a las once,  calle……………

Llego el día, estaba preparado, limpito, depilado para un correcto deslizamiento de la lengua y perfumado
Llegue al piso situado en Sarrià zona de gente con dinero, llame y me abrieron abajo y subí por las escaleras hasta el noveno piso para llegar marcando tableta

Y que tuviera menos motivos para no ser una salvaje,  pique a la puerta y al a abrir…

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Wow!!!! las amigas de afrodita no se quedan cortas,  estaban en camisón a tres metros de mi,  una sentada en la mesa y la otra de pie,  se daban la boca como si se acabara el mundo,

la pelirroja estaba aguantando la puerta en tanga y el pelo cubriendo casi sus tetas, dejando ver un pezon entre el cabello,

Al principio pensé que había tocado el cielo,  tres mujeres para mi, pero la pasión de las amigas devorandose demostraba su lesbianismo sensual y pasional

Regrese a mi pelirroja que sentada en el sofá se frotaba el clitoris despacio y haciendo un gesto con la cabeza para que fuera, caminé poco a poco, desnudandome, observando el paraíso, esos dos bombones fundiendo los labios mientras se apretaban los pezones y la pelirroja esperándome colorada,  ardiendo con la mirada en mi polla hinchada pero flácida del miedo, tengo que estar a la altura me dije,  al llegar delante suyo me incorpore para lamerla suavemente, me detuvo delante, empezó a masturbarme , quería que se me pusiera dura,  mientras me tocaba observaba  a las amigas, ahora estaban delante en la cama,  una tumbada boca abajo  mostrándome una raja perfecta de jovencita , comiendoselo todo a la otra, que con su brazo por la espalda le estiraba los labios,  le introducía dos dedos alternando con el culo el cual se dilataba,
No tarde en tenerla dura como el hierro,  note un tirón en el capullo el cual me dolió y gusto,  bajándome al pilón, el clitoris chorreaba , su olor me encendía, se lo comía mientras le introducía un dedo en el culo, se tocaba los pechos,
El sabor de su chochito , sus espasmos, los gemidos de de tres mujeres sin compás era lo más sexual que había vivido

Decidí penetrará, llenarla por completo,  con una mano le apretaba  un pecho y con la otra le introducía el dedo gordo en la boca el cual mordía de vez en cuanto,
las amigas estaban ahora con una tijereta de altas revoluciones, sudorosas, los cuatro pechos se movían gelatinosa mente, cruzamos miradas de deseo, ffffff esto parece que me puede,  noto la vida queriendo salir de los huevos, apreto los dientes y sigo.

La pelirroja se separa de mi y se dirige donde están las amigas y se pone al lado a cuatro patas, me mira picarona,  se lo que quiere,  me acerco y envisto de nuevo pero por la retaguardia, le di un par de cachetes, le quedaba justa y eso hacia que disfrutaramos mucho los dos,

Las amigas empezaron a besarnos por todo el cuerpo mientras la follaba,  cogieron dos pollas de plástico que me intimidaron, se sentaron una delante de la otra entrelazando las piernas, introduciéndose los pollones mutuamente,  yo seguía enculando con ganas,

Notaba por sus gritos  que estaba a punto de correrse , quería llegar al clímax con ella,  cogiéndole de los hombros para poder hacer más fuerza al penetrarla y llegamos juntos,  nos miramos relajadamente con una respiración acelerada, nos abrazamos y vimos a las amigas correrse juntas,  acabando con un sesenta y nueve sensual,  parecía que se limpiarán una a la otra

Me desperté por la mañana

y mire a los lados para corroborar que no había soñado con las tres ninfas que hicieron que adore más el sexo.

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Fin.

Author: Enric

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