Confesiones de una chica muy caliente – 2 (mi maestro de matematicas)

Durante mis primeros años de la Universidad me habia convertido en una chica muy popular, no me faltaba invitacion a cuanta fiesta habia, una larga legion de admiradores tras mio, siempre representando a mi facultad en cuanto concurso de belleza habia y casi siempre eterna ganadora.

Conoci muchos chicos y por ahi con uno de ello comenze a salir. Mi caliente sangre caribeña no necesitaba mucho para encenderse y por ahi tambien tuve algunas experiencias en el sexo, pero nada fuera de lo normal.
Yo no se si por mi popularidad, espontaneidad y extrovertido caracter o creo que por mis atributos fisicos me habian nombrado como representante de mi aula, pues creian que yo todo lo podia conseguir con un coqueto gesto o picara sonrisa y creo que asi, fue, siempre terninaba convenciedo a mis maestros para que nos dieran nuevas oportunidad de recuperar notas de examenes y otras facilidades para aprobar los cursos, todos excepto uno. El maestro de matematicas.

Se llamaba Santiago y el unico que no habia cedido a mis tretas. Tendria unas 30 o 32 años, era guapo, aunque como todo esos medios genios locos, algo descuidado en su apariencia, su rostro siempre a medio afeitar, su corbata fuera de lugar y aunque asi descuidado, su apariencia era de muy macho aunque de pocas palabras.

Estabamos en nuestra ronda final de examenes y la mayoria de la clase andabamos mal en el curso, con muchas probabilidades de reprobar. Mis tretas para conseguir facilidades para los examenes y recuperaciones habian fracasado ante el, y se habia convertido en todo un reto para mi. Entonces tuve que recurrir a nuevos argumentos.

Opte por sentarme en la primera carpeta de la fila que estabe en frente a su escritorio, siempre con vestido corto o mini y muy disimuladamente le habria mis piernas de vez en cuando. Ello lo ponia nervioso y lo notaba y mis compañeros tambien que soltaban escondidas risas. En mas de una oportunidad lo habia chapado mirandome y al sentirse descubierto se ponia colorado y se sobaba el sudor de su frente, ahora pues todo era cuestion de tiempo y esperar que ceda a la tan ansiada recuperacion de examen que necesitabamos para aprobar el curso.

Mis compañeros me empujaron a que vaya a su casa, se habian conseguido la direccion de su departamento y a ruegos me pidieron que vaya, cosa que no tuve mas remedio que aceptar.
Me vesti muy atrevida, con un corto vestido y toque su puerta.
Al abrir y verme ahi parada delante suyo se quedo sorprendido y me dijo:
– Señorita Riquelme, que hace ud. aqui?
– Deseo conversar con Ud. -le dije- puedo pasar?
– Pues claro, adelante, tome asiento -me dijo, acomodandome en un comodo sillon.
– Desea beber algo, -me pregunto-
– Si tiene una cerveza helada le acepto, ya que hace mucho calor -respondi-

Seguidamente regreso con dos latas una para mi y otra para el
Rapidamente se sirvio un sorbo, estaba sentado casi enfrente mio y rapidamente apuro otro sorbo mas.
Estaba nerviosisimo, yo estaba cruzada de piernas con el vestido muy recojido y muy confiada en mi misma.
– Profesor, necesitamos una nueva oportunidad para el examen, todos estamos bajos de calificaciones y si no damos una recuperacion, podemos reprobar muchos – le dije

El se mostro renuente, me dio muchos argumentos en contra
Luego vinieron unas latas mas y yo siempre tratando de conseguir el ansiado examen de recuperacion, mostrandome cada vez mas coqueta y jugando con mis piernas que las cruzada de uno y otro lado.
El sabia que estaba perdido, yo cada vez lo provocaba y acorralaba mas, pero el habia decidido cobrarse el favor, nada lo haria gratis.

Entonces se levanto de su sillon y se fue al mio y se sento a mi lado.
– Esta bien, Ud. gano srta. Riquelme, les dare la recuperacion, pero y que gano yo a cambio me dijo, mirandome con mucha malicia quiza por el efecto de las cervezas.
– Creo que Ud. ya gano, -le dije- el reconocimiento de todos nosotros

– Yo soy un hombre practico -respondio- yo no vivo de reconocimientos
Y poniendome su caliente mano sobre mis piernas me dijo
– Tu seras el precio, si no no hay nada y dicho esto, con su otra mano embolvio mi cuello para besarme en los labios, mientras su otra mano sobre mis desnudas piernas comenzaron a atacar.
Yo como siempre trate de safarme y quitar sus manos de ahi, pero me habia sujetado muy fuerte y no me solto los labios. Mis esfuerzos fueron vanos, Con la mano que me rodeaba el cuello tambien sujeto fuerte mi mano que le impedia que el explorara mas mis piernas y asi dominada ya, el se concentro en su besos mientras su otra mano libremente se metia bajo mi falda, hacia su destino final.

Todos mis intentos por zafarme finalmente cedieron cuando el llego al final, me comenzo a sobar sobre mi calzon en mi vagina y ahi si cedi y me entregue a su pasion. Me deje llevar y hacer lo que el quisiera.
Si que era todo un experto, sus besos quemaban mis labios mi cuello, me habrio la blusa y descubrio mi pecho y ahi comenzo a juguetear y besar mis erectos senos, su otra mano, siempre sobandome mis parte baja, mis piernas, nalgas, y todo cuanto podia agarrar. Sus manos quemaban y asi entre besos y caricias, me fue quitando el calzon, entonces se arrodillo en el suelo y abriendome la piernas yo sentada semi recostada y ahi metiendo su cabeza entre mis piernas me comenzo a lamer mi conchita que estaba mojadita. Sentir su aspera cara como lija entre mis piernas me exito tanto, que apretaba mi piernas, abranzandolas en su cuello, para que no pudiera escapar de alli.

Luego de un largo rato se paro y delate mio se desnudo. Su miembro era grande y gordo y brillante como una bola de billar, rojo, parecia a punto de reventar. entonces asi en esa posision, con mis piernas sobre sus hombros me la comenzo a meter.
fue divino, tenia mucha fuerza, yo me sujetaba de sus embistes cogiendome de sus fuertes brazos como dos columnas a ambos lados de mi cintura. Luego, me cambio de posision y con mucha facilidad manipulaba mi fragil y delicado cuerpo de un lado a otro, en la posicion que el queria. Y fue asi, como despues como de 30 minutos de fuertes embiste, que finalmente su cuerpo se contrajo y senti por primera vez como un liquido denso y caliente llenaba en mi interior. Yo tambien tuve varios orgasmos y me entregue plenamente a aquel acto.

Luego de ello, quedamos exaustos, semi desnudos sobre el sillon, sin pudores con nuestros sexos al aire, solo tratando de recuperarnos de este divino acto. Despues de asearme y vestirme me dijo:
– Vete a la univerdidad, tu ya aprobaste la asignatura, tus compañeros tendran este fin de semana una nueva oportunidad, que estudien mucho y en cuanto a ti, te espero esta noche despues de clases.
Cuando les comente a los chicos de la U, todos se alegraron, me preguntaban una y otra vez como la habia convencido e invente unas mentiras, pues jamas les conte que precio que habia pagado por salvarlos y a mi tambien.

Durante esas tarde, no pude concentrarme en mis estudios, estaba en otro lugar, y solo miraba el reloj, contando las horas y minutos que se haga de noche y correr a enntregarme a otra jornada de placer.
Cuando llego la hora, llame a mi casa y pedi permiso, que por examenes de fin de curso me quedaria a estudiar con mis amigas en la casa de una de ellas asi, nuevamente esa noche me presente a la hora convenida.
Asi, despues de cenar en su departamento y de beber algunos licores, me entregue una vez mas a el hasta quedar saciada y rendida y exausta de tanto sexo, me quede dormida sobre su desnudo pecho.
Creo que no hubiera despertado si no es por una caliente mano que jugueteaba en mis intimidades y asi semi dormida, deje que el diera rienda suelta a todos sus juegos y caricias, que fueron muchas. Finalmente senti como su miembro como una serpiente me penetraba otra vez, yo nuevamente me volvi el volcan en erupcion que era y asi esa mañana inaugure un nuevo dia.
Demas esta decir que mis compañeros todos aprobaron.
Durante aquel ultimo mes, repetimos aquellas jornadas, lamentablemente sabia que era su ultimo año ahi, pues debido a una denuncia de una alumna por acoso, se retiraba de la U, creo mas bien como el me confeso, que ella se le entregaba, pero como el no quiso involucrarse con ella invento una mentira.
De todas maneras a ocasionalmente lo vi por la calle algunas veces, con su bonita esposa, y yo siempre en compañia de amigos, de manera de no volvimos a repetir estas experiencias, que me marcaron para toda mi corta vida.

Luego de aquella vez, decidir ternimar con mi novio, pues me di cuenta a mis cortos 20 años que deseaba estar libre para seguir los impulsos de mi cuerpo sin perjudicar a nadie. Pues se que aun me faltaba mucho por descubrir y otra impactante experiencia es la que les cuento en mi proxima narracion,

Author: victoras

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